Entradas

La Muchacha Ebria

Imagen
Mariposa estropeada por el alcohol, que en brazos desconocidos te dejas pisotear . Entre cantinas, cortinas de humo y alcohol la virtud has perdido, gesticulas, gritas, lloras y sueñas una ausencia, ¿muchacha ebria, que penas llevas? Eres Inefable ternura para los hombres te enredas con los sudores molidos de esos hombres desnudos en esa noche negra te abandonan en cualquier motel para ellos sólo fue sexo sofocante y te desgastaron de mil formas. ¿nunca lo recuerdas muchacha ebria? A nadie le importa tu llanto ebrio tampoco tus lágrimas de claveles, en el lumbral de las cantinas entregas tu corazón derretido tu sexo ya está dormido, aún tus manos son delicadas tu cabello tan suave como la seda y tus labios carnosos de color carmín. Muchacha de estúpido sonreír deja la angustia, la tristeza y el abatimiento muchacha ebria deja de ser mendiga de amor.

La Otra

Imagen
Sí, así le llaman, ¡la otra!… A la que denominan: ramera, zorra, prostituta, callejera, sin vergüenza… Sí, a la No tan dama; a la que no le importa nada y no busca compromiso. Unas lo hacen por dinero otras lo hacen por venganza. Unas lo hacen por placer otras lo hacen porque les dan la gana. Sí, la segunda; la que tu marido te dejó por esa. Esa, la que te dejó sin amor y sin placer. Sí, así le llaman, ¡la otra!…

Quizás Mañana

Imagen
¡Calla! se sigilosa si se levanta él se enojará me gritará me insultará dirá blasfemias y de nuevo agacharé la cabeza para no provocarlo. (Quizás mañana él cambie por amor a nuestros hijos) ¡Calla! él llega ebrio no le reclames deja que te desnude y te penetre, tu sexo sangra aguanta el olor nauseabundo del alcohol, el grotesco sudor grasoso y su rugido violento ahoga tus lágrimas tu dolor tu miedo pronto terminará duérmete. (Quizás mañana él cambie por respeto a nuestro matrimonio) No digas nada solo cúbrete ahí viene el primer golpe el segundo el tercero… ya no se siente no lo recuerdo estaba inconsciente. (Quizás mañana él cambie porque se lo he pedido a Dios) ¡Calla! no lo enfrentes soporta cubre tu boca no grites él se enfurecerá, mientras arrastra tu

Quimera

Imagen
Soy quimera de tus más cálidas ráfagas de viento que te deleita. El arcano más íntimo de tus anheladas noches de soledad la razón de tu inspiración y la calma de tu dolor en tu pecho. La que aviva tus pasiones con sólo acariciar tus manos firmes y ávidas. Yo, la que hila de oro y plata tus sábanas llenándolas de rocío escarlatas para tus sueños. La que emerge entre tu añoranza para darte las horas de estupor que arde en lo más infinito de tu ser. Soy la cópula esperanza hecha realidad en tus noches de desvelo. La que delinea con mis labios los últimos versos hecho de piel dibujado en tu cuerpo húmedo, solo yo podré hacer eso, ¡amor mío!... ¿y quién más lo haría? tu quimera La que estará hoy, mañana y siempre en tu pensamiento la que es libre , totalmente libre ¡Sí, esa soy yo! Tu libre fantasía la que nombras en silencio.

Distorsión

Imagen
Mi mente me traiciona y juega a no ser yo. El espejo me mira la imagen se deforma. El miedo llegó ya no quiero salir. Me cubro los ojos ya no estoy aquí. Silencio Quietud Calma

Dile a Esa

Imagen
Dile a esa que lo tiene todo, Juventud Carisma Belleza Y Santa Virginidad, ¡que la felicito!... porque se llevó, tu amor tus caricias y tu cuerpo. Dile a esa, que son tantos años de entrega total de paciencia de sacrificio de desvelo y de luchas. El tiempo borró todo, ¡te acuerdas!... enfrió nuestros deseos mató nuestras pasiones deshizo nuestro interés, nuestra cama se tornó monótona seca y vacía. Cuando esa apareció mi vida era indiferente, de lo indiferente pasó a la desesperación, de la desesperación a la depresión, de la depresión a la reflexión y ésta a la liberación. Dile a esa, que no solamente ella ganó, porque al dejarte ir recuperé mi libertad y mi dignidad.

El pan de cada día

Imagen
El grito del silencio rompió la madrugada. Las calles se llenaron de rojo carmesí, la luna fue su único testigo mientras los búhos miraban escépticos el cadáver. ¿Quién fue? ¡Pobrecito! ¿Y quién era? El vacío de la noche reclamaba lo sucedido. A lo lejos, el llanto de una madre se desgarraba entre el filo del frío; de rodillas, sostuvo su vientre donde un día dio vida, reclamando su fruto inerte. Negra luz Lobos de sombra Cazadores de sangre ¿Dónde están? El silencio entró con la penumbra y los búhos no se volvieron asomarse jamás.